Mujeres, el debut, fue un disco perfecto. En 2009, el cuarteto
barcelonés era el-grupo-en-boca-de-todos. Su primera maqueta, Demo 08
(Hombre Bueno Discos), le había prendido fuego al culto local, avivado
por una incendiaria retahíla de conciertos-en-los-que-había-que estar.
El rumor de su incandescencia llegó hasta Oviedo, base de operaciones
de ese francotirador del underground que es Pablo Fernández. Consciente
de la joya en bruto que tenía entre manos, la sexta referencia de su
sello Discos Humeantes se la concedió a Yella, un siete pulgadas con “3
tres canciones de muerte y sudor” que no hizo sino derramar queroseno a
hectolitros en la mecha sobre la que ya cabalgaban desbocados Pol,
Martí, Yago y Martín. Deprisa, deprisa. Más conciertos atrapa fans (en
el Wurli de Madrid, en su unplugged del Primavera Sound 09, de gira por
Inglaterra o en el francés Europavox Festival), más reseñas excitadas
(en medios patrios pero también en influyentes escaparates yanquis como
Maximum Rock’n’Roll o Terminal Boredom) y, por fin, el debut. Mujeres
(Sones, 09) era la mejor carta de presentación que jamás pudieron
imaginar. Santi García, productor de dilatada trayectoria, supo plasmar,
en cinco frenéticos días, el espíritu, la energía de esos cuatro
jinetes en estampida libre en un disco robusto y sin mácula que se
clavaba en la cadera del oyente cual cerbatana impregnada con las
esencias del garaje-rock más venéreo y alocado de ayer y hoy. Mujeres
creó adicción y Pol, Martí, Yago y Martín engancharon a nuevos fieles en
una gira pantagruélica que les llevó hasta el SXSW,
el-festival-donde-hay-que-estar si quieres tener una oportunidad en la
tierra prometida estadounidense. Vini, vidi, vinci. Hasta aquí la
crónica atropellada del sueño hecho veloz realidad de cuatro amigos de
Barcelona. ¿Y ahora qué?...
Soft Gems, el nuevo, es un disco mejor. ¿Por qué? Porque Mujeres es
ahora un grupo mejor. Superada la espumosa, cegadora resaca del éxito de
su debut, estos cuatro amigos han asumido que, en realidad, Mujeres no
fue ese disco tan perfecto que todos quisimos ver, hacerles creer. En
cierta manera, han interiorizado esas palabras de Herman Hesse: “Hay
quienes se consideran perfectos, pero es sólo porque exigen menos de sí
mismos”. Negarse a caer rendidos en brazos de la autocomplacencia,
trabajar a destajo cada nueva composición ha sido una de las máximas a
la hora de afrontar el siempre difícil segundo disco. Hacerlo sin perder
un ápice de aquella excitación que prendió la mecha y reforzando más si
cabe los mimbres de esa camaradería que convierte a Mujeres en
hermanos, es una virtud que sobrevuela cual brisa cálida las once
canciones de Soft Gems. “Estamos felices y muy ilusionados. Este disco
es el fruto de horas y horas de trabajo de grupo en el local y en el
estudio. Nuestro objetivo era exprimir al máximo cada composición, darle
vueltas a juegos de acordes, experimentar con ideas rítmicas. Hay
baladas y pogo, canciones para escuchar en una playa desierta o para
saborear una sobremesa inacabable entre amigos”. Exigencia y entusiasmo.
Y un nuevo cómplice, el músico y productor Cristian Pallejà, con quien
armaron un artesanal estudio de grabación en una casa rural en Sant
Martí de Sesgueioles, a hora y pico de Barcelona. Tras encerrarse allí
durante siete días de diciembre de 2011, sin atender otro reloj que no
fuera su propio tic-tac mental y dándole al REC cuando el cuerpo, la
inspiración o la canción se lo pedía, Mujeres regresó a casa, a los
estudios Maik Maier, para realizar las mezclas, y luego lo enviaron a
Brooklyn para ser masterizado en Bonati (HEALTH, Iceage, Woods, etc.),
otra de las claves que ayudan a entender el salto hacia delante que
significa Soft Gems. Es este un disco menos epatante y más sugerente,
menos deudor de sus singles (que también los tiene, ojo con “Soft Gems
pt 1”, “Calabrese fingers” o ese “Salvaje”, pura demolición) y más
valiente en su apuesta por el desarrollo de un tejido sónico que mantea
al disco con su brumosa reverb. Hay reencuentro con ese trote marca de
la casa que le da alas al polvo fronterizo de “Far away” o al beat
surfero de “Seattle waves”. Pero, ¡ah!, qué sorpresa verse mecido por
“I’m over with you”, arrancando cual instrumental de baile de graduación
para alzarse en baladón desgarrado que uno imagina cantando por Ricky
Nelson al borde de un acantilado. Otra alegría: recuperar ese “How I am”
que ya hechizaba cual serpiente velvetiana en su primera maqueta y que
aquí se enrosca con más fuerza al tímpano gracias al escuadrón de
pandereta, armonías vocales y tremolo. Y es que las guitarras, ¡cómo
suenan las guitarras (y todo) en este disco! ¿Cómo? Con la
(im)perfección que hoy hace de Mujeres un grupo grande. Pero mañana,
más. Seguro. Roger Estrada
http://mujeres.bandcamp.com/
Discografía
Soft Gems (Sones, 2012)
Eix Transversal 7". Split amb Surfing Sirles (Sones/Bankrobber, 2010)
Mujeres (Sones, 2009)
Yella 7" (Discos Humeantes, 2009)
Demo cd-r (Hombre Bueno Discos, 2008)
https://www.youtube.com/watch?v=QsPh5XABD3I
https://www.youtube.com/watch?v=VamUvcaSpG4
https://www.youtube.com/watch?v=NV9_8n_gyFA&feature=relmfu
Travesti
Afgano son una célula de la yihad musical underground gallega, formada
por tres Muyahidines de la sexualidad y el amor libre!!!
Descrición
Afgano
oh¡¡¡¡saio as 6 de villamelocoton,veo os horreos e puticlubs de
camiño,en pontecesures collo de frente e en caldas a dereita.Chego,
bouramos coas galiñas.Imos con cipricolas ver las plantas,fumamos un
grelo.Imos ó risonsiño,non dan tapa..,cipuesco mira o partido,tomamos un
de xamon asado,tiramos pa ponte,poñemos o hilo musical no elevador.En
casa miramos os libros e coleccion de botellases,escoitamos os
discos(fabuloso,the fall,fall,mark e.smith,telefones) .imos a de sergio
non esta ,imos o cabaret,bailamos sen camiseta.Erguemonos,imos ó meson
do pulpo,tomamos os callos,me canso arranco pa santiago a descansar.l
Intereses da banda
Comer, drogarse, los castigos divinos, la yihad y el amor libre.